Estaba un lobo caminando casi a la hora del atardecer, cuando se
percató de lo grande y alargada que se veía su sombra, que
se dijo hacia el mismo:
"Yo siendo tan grande, ¿como me va asustar un león? ¡Con esta
talla, estoy seguro que será muy fácil convertirme en el rey de todos los
animales!".
Mientras hablaba y mostraba su orgullo, un enorme león cayó sobre el y
lo comenzó a devorar. El lobo, a punto de morir, se dijo:
"Llegó esta desgracia a mi por ser tan orgulloso".
Moraleja: No tomes en
cuenta el valor de tus virtudes solamente con la apariencia que ves con tus
propios ojos.
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